"Che Sarà? ...che sarà della mia vita chi lo sa? So far tutto o forse niente. Da domani si vedrà. Et Serà, serà cual che serà" Así decía una de las estrofas de la canción de Jimmy Fontana y Franco Migliacci.
Pero ellas vienen a cuento por un cierto Cardenal "conservador" o mismo "neo tradi" , Robert Sarah, que ayer lo veíamos en Chartres pronunciando un bello sermón como puede apreciarse y leerse aquí:
Y que hoy lo vemos arrodillado frente a uno así y cantando loas a otro aquí:
¿En serio, Juan Pablo II, el "más grande hombre del siglo XX"? ¿Por encima de un San Pío X, de un San Pío de Pietrelcina? (por no nombrar sino Santos canonizados, porque hay otros que pueden esperar...)
Ahora esperamos que les quede claro el porqué de nuestra desconfianza hacia los conservadores y hacia ciertos neo tradis. Decíamos de su liberalismo, modernismo y fariseísmo y las fotos y dichos lo comprueban: sermón y Misa tradicionales seguido de veneración a quién desvirtuó la Misa tradicional y loas a quién, entre otras cosas, "excomulgó" a la Tradición.
Se ha comentado estos días que las canonizaciones sólo garantizan que la persona está en el Cielo (y sobre ello, estamos de acuerdo en que nadie puede prejuzgar), pero el objeto formal de la canonización es la práctica de las virtudes en grado heroico y la misma cantidad (reciente) de las "canonizaciones" está indicando, precisamente, una baja en la calidad requerida para la misma (la "heroicidad"). A lo que se suman los otros argumentos que expusimos en nuestro post anterior, de siempre y coyunturales.
Entonces, la premura en el arrodillarse del purpurado habla de una perversión anterior en la Fe del mismo (descontamos en su caso la mera ignorancia) que lo predispone a ello a modo de falsa obediencia. Claro que esta postura es más fácil que la de tener que revisar todos los aspectos que conlleva una canonización, y lo mismo el intentar explicar cómo una ley litúrgica puede resultar perjudicial a las almas o una doctrina falsa colarse por el Magisterio, pero a ello conduce o debería conducir el "amor de la Verdad".
En el plano objetivo le reconozco plenamente que esta gente todavía tiene un débito muy grande en lo que alinearse con la Tradición compete, incoherencias del tamaño de un buque, pero mi experiencia es que no podemos desdeñar los apegos emocionales, psicológicos y muchas veces también la incapacidad de ver la contradicción de que adolece la mente humana. El punto es, les vamos a negar nuestro apoyo en aquellos puntos en que vemos están yendo en la dirección correcta, por la brecha que les falta del camino?
ResponderEliminarEn mi experiencia personal, he visto lo largo de los procesos de mucha gente para ir paulatinamente reconociendo la verdad, a veces a punta de duros golpes, pero donde resultó crucial que se les tuviese la paciencia debida.
Le podría dar numerosos ejemplos, desde un Cardenal muy importante, en retiro, duro de la línea de Ratzinger, que hoy veo confesándose y frecuentando la FSSPX, bloguistas de cosas tan neocon como infocatólica, que hasta hace unos pocos años despotricaban contra el "filolefebvrismo" y hoy manifiestan admiración por Lefebvre y su denuncia al falso ecumenismo y tantos cercanos incluso, que perfectos en cuestiones filosóficas, siguen teniendo admiración por el "magno".
Es que no podemos desdeñar la flaqueza humana, el que personas desde niños, familia toda incluida, hayan tenido por santos a estos ídolos de barro, cosa que les impide ver (o aceptar) lo que nosotros vemos. En estos casos, ¿debemos rehusar hacer cualquier tipo de causa común con ellos, siendo que a veces es este mismo contacto es el que los lleva a abrir los ojos?
Estimado Francisco: tiene toda la razón. Y la "razón" de estos posts es contribuir a ello, aunque puedan parecer coces. Nosotros mismos hemos sido testigos de esa evolución que Ud. relata y no hemos rehuído nunca el contacto (claro está, manteniendo nuestras ideas). Sí, no debemos perder de vista nunca que ante todo somos católicos, que hay ritos tradicionales orientales o latinos que no sean de la FSSPX, que normalmente hay confesión válida y lícita fuera de la FSSPX (más allá de las dudas doctrinales que pueden formularse a los Sacerdotes de la FSSPX por fuera del Sacramento), que pueden existir devociones (Rosarios, Procesiones) que no impliquen participación en ningún rito ilícito. En cuanto a lo que Ud. relata del aspecto psicológico también es así. El tema pasa por la búsqueda de la Verdad, y si en esa búsqueda no interfieren otros aspectos terrenales (relacionamientos o posicionamientos eclesiales o sociales, facilidades materiales, etc)
ResponderEliminarPara visualizar esa diferenciación en el plano objetivo resulta muy interesente leer el reciente artículo del P. Gleize (FSSPX) sobre los treinta años de la "Comisión Ecclesia Dei", especialmente el apartado 9, donde claramente se deja dicho que, más allá de "los buenos pensamientos o ideas" que pudieran tener sus miembros, los mismos adhieren a los postulados mismos de la Comisión, entre ellos, que la FSSPX no está en la "plena comunión" o de que aquélla "tiene una noción incompleta o errónea" de la Tradición...
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