viernes, 25 de marzo de 2022

Recuento de una jornada especial y su prólogo

Al recordar una de las entrevistas con Sor Lucía, el Canónigo Barthas nos relata: "En 1946 ignoraba totalmente la visión de 1929. Sor Lucía me dijo que Rusia se convertiría cuando el Santo Padre, reunido con los Obispos del mundo entero, hubiese consagrado ese país al Corazón Inmaculado. Le dije que esa reunión me parecía muy irrealizable. Ella me respondió : Sí, sí !Yo, lo veo".

Claro está, muchos se imaginaron esta ocasión a su gusto, como siendo llevada a cabo por un Papa "tradicionalista", con una puntillosidad fuera de este mundo y por Obispos igualmente impolutos, en medio de la algarabía general. Y resultó ser todo lo contrario: Dios se sirvió de un Papa cuya ortodoxia deja  que desear, con aspectos que generaron dudas, la participación de Obispos imperfectos y una suerte de apatía (en cierta clase que veremos).

Y puesto que esto no estaba en sus planes, de que no había forma de detener el "momentum", la estrategia utilizada fue el boicot, por la calumnia y las trabas a la consagración proyectada. Pero no se imaginen que el mismo tuvo su origen en sectas secretas u otros agentes del poder. Para ello bastaron operadores o tontos útiles: "predicadores católicos", bloggers de dudosa catolicidad, Sacerdotes "mutis por el foro", "Mensajeros" que no anunciaron nada, la conocida fauna de "ismos" y "entes", Foros de discusión "distraídos"...Lo que no contaban era de que, tal como le confió Sor Lucía al P. Alonso: "la consagración de Rusia y también el triunfo final del Corazón Inmaculado de María que le seguirá, son absolutamente ciertos y se realizarán no obstante todos los obstáculos".

Aquí se impone una aclaración importante: cuando titulamos la entrada precedente haciendo referencia al "Triunfo final", algunos pudieron pensar que era equivocado o que no se ajusta a la realidad del 'día después'. El tema es que el "triunfo final" se verificará cuando las promesas  (conversión de Rusia, paz mundial) empiecen a tener lugar, y en ese instante, la gente asocie los tales eventos con la consagración realizada con anterioridad. En una palabra, el  "triunfo" se produjo con el acto de consagración, pero se concretará con el cumplimiento de las promesas. De allí que pensamos -sin que podamos determinar fechas exactas- que éste último no debería extenderse en demasía de modo que se pierda el nexo causal entre ambos. 

Y otra aclaración importante: nosotros hemos hecho una suerte de 'apuesta' al afirmar que la consagración fue hecha cumpliendo todas las condiciones pedidas por la Virgen y que, en consecuencia, es el "triunfo final" con el alcance que explicamos recién. Decimos esto puesto que otros -entre los cuales muchos de los 'tontos útiles'- al haber visto que la consagración se realizó con dignidad y cumpliendo los requisitos,  ahora salen con lo de que "se pueden esperar algunos efectos de esta consagración..." No 'apuestan', puesto que de otro modo tendrían que reconocer que  los obstáculos que fueron sembrando fueron siendo levantados de a uno (a vía de ejemplo: que se incluyó a Ucrania, que los Obispos no estarían presentes, que se incluyó a la ' humanidad', que la "Tierra del Cielo").

Sin embargo, este sabotaje, no obstante no alcanzar sus objetivos, obtuvo sí un efecto negativo: al infundir temores y dudas sobre la validez del acto, el fervor y las oraciones disminuyeron, no se tocaron las campanas (¿o quizás nostros nos las perdimos de oírlas?), de lo cual deberán responder ante el Cielo.

En medio de esta operación de socavamiento del acto de consagración, una figura señera se levantó: Mons. Athanasius Schneider, Obispo de Kazajstán, con el cual, sin ponernos de acuerdo,  fuimos coincidiendo en ese intento de despejar dudas y relativizar -que no anular- ciertos dichos de Sor Lucía en cuanto a cómo debía desarrollarse el acto o bajo qué condiciones sería efectivo. 

El 'sólo Rusia' por ejemplo, nos parece un claro recurso de Sor Lucía para enfatizar que otros objetos no figuraran en lugar del pedido por la Virgen, como objetos exclusivos, pero no con exclusión de aquéllos (como lo demuestra la consagración de Pío XII del 31 de octubre de 1942 que trajimos a colación y que resultó "incompleta" pero del agrado de Dios); el "invitar" en lugar del "ordenar" a los Obispos, siendo una cuestión unicamente terminológica, dado que estamos ante una 'revelación privada' que no obliga y de que, en todo caso, no anula el 'libre albedrío', importando sólo la presencia del mayor número en una 'unanimidad moral'; el del "mismo tiempo", como no siendo una cronometrización perfecta sino suponiendo una "jornada especial, de oración y reparación", etc

Del lado de la FSSPX, si bien nos congratulamos con su toma de posición en cuanto a "alegrarse" por la "consagración", su participación en el acto -la única que se le exigía, la de que sus  Obispos recitaran la fórmula de  consagración que hubiesen elegido para la ocasión (el pedido de la Virgen no era el de unirse a una determinada oración sino a la 'consagración de Rusia')- no quedó del todo clara o no fue suficientemente explicitada con lo de 'recitar una oración particular por la paz'. 

Nadie puede conocer cómo Dios va a operar los milagros -porque lo serán- de la 'conversión de Rusia' y del 'cierto tiempo de paz para el mundo'. Muchas incógnitas se abren, entre ellas la de cómo será posible una conversión que quedara a resguardo de las autoridades modernistas  o la de cómo una paz sería posible con la persistencia de ciertas potestades terrenas y de sus titiriteros en las sombras. Lo más probable es que un Armagedón esté a las puertas. 

6 comentarios:

  1. Muy acertadas sus reflexiones. En mi opinión, el espíritu partisano ha sido terrible: cada grupito aferrado a sus certezas frente a la evidencia del acto, la Consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María.
    De la FSSPX solamente vi la consagración de Mons. Fellay en Estados Unidos, pero nada de los obispos Tissier de Mallerais y de Galarreta.
    Muy cordial saludo

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  2. Ahora, qué sería exactamente un Armagedón, porque si es una guerra nuclear, no sale nadie vivo. Esto es tan cierto como que hay incluso simulaciones de guerra nuclear a escala limitada entre India y Pakistán y eso basta para producir tales descalabros por contaminación que no saldría nadie vivo. Tiene que ser otra cosa.

    Fellay siempre ha sido el mejor de los obispos de la FSSPX, el único que entendió que la regularidad canónica no era un problema sino una ventaja.

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    1. Anónimo: en otro post hemos dicho de que "Armagedón" no hace referencia a una guerra nuclear sino al actual mundo anticristiano en su clímax, el cual será derrotado por Cristo con el 'resplandor de su Venida'.

      Si, Monseñor Fellay es el mejor de los tres Obispos fieles, y lo ha demostrado en esta ocasión y en la que Ud. menciona (aunque la cuestión del reconocimiento unilateral era un tema de potestad de Roma y obligación de obedecer por parte de la FSSPX, no el de obtener una ventaja).

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  3. "...nosotros hemos hecho una suerte de 'apuesta' al afirmar que la consagración fue hecha cumpliendo todas las condiciones pedidas por la Virgen y que, en consecuencia, es el "triunfo final" con el alcance que explicamos recién"
    ¿"apuesta"?
    ¿Que fue lo que Ud. "aposto"?
    ¿Considera Ud. exista algun dejo de certeza en lo que pueda llegar a plantear un Santo Padre de la inconsistencia ideologica propia del Actual?
    ¿Seria posible "apostar" a que la Divina Providencia se Contradiga en los requerimientos todos que exigio antes?
    ¿Me equivoco si pienso que tal "consagracion" cae por si sola?
    Acaso:
    ¿satanas puede combatir(se)a si mismo?
    Veo que la confusion imperante nos obnubila con sus humos colados en la grieta a la que se refirio otro Santo Padre.

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    1. Sí, arriesgar la opinión de que todas y cada una de las condiciones puestas por la Virgen se han cumplido en esta consagración. Es 'arriesgar opinión' puesto que sólo se sabrá si nos asiste razón una vez que se cumplan las promesas.
      Para nada es imposible que alguien con 'inconsistencia ideológica' pueda hacer un acto bueno, como ha sido el caso.
      Ninguna contradicción en el acto de consagración, fue realizado tal cual lo pidió la Virgen.
      Se equivoca totalmente (no sé si con buena o mala fe).
      ¿Ud está acusando al Papa de 'satánico'? que conste que le publico el comentario sólo para dejar en evidencia su malicia.
      La confusión es la que genera Ud y gente como Ud (no sé si con buena o mala fe).

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    2. Recurri a su reconocida sapiencia de buena fe.
      Lo que no me fue posible comprender es que se trataba de de alguien que juzga la malicia o buena fe de los demas.
      Ante tal evidencia le ruego disculpe la molestia causada.
      No tendra Ud. que hacerme el favor de volver a publicar mis desmesuras.
      De todas formas se agradece su atencion.

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